H. Cd. de Chihuahua.- Desde que inició la narcoguerra entre las facciones del Cártel de Sinaloa —Los Chapitos y La Mayiza— en septiembre de 2024, Mazatlán se ha convertido en uno de los municipios más golpeados por la violencia. En poco más de un año, 656 personas han sido reportadas como desaparecidas, lo que equivale a un promedio de 1.6 desapariciones diarias, según datos del periódico Noroeste.
Entre las víctimas se encuentra el duranguense Carlos Emilio Galván Valenzuela, desaparecido el 5 de octubre en un restaurante de la Zona Dorada. De hecho, siete de los desaparecidos en Mazatlán son originarios de Durango. En todo el estado de Sinaloa, las autoridades federales y estatales han contabilizado más de 2 mil homicidios dolosos y 2 mil 635 víctimas de desaparición forzada, de las cuales 1,851 siguen sin ser localizadas.
Las zonas con mayor incidencia son Culiacán (1,187 casos), Mazatlán (656) y Ahome (114). En respuesta, la Secretaría de Seguridad Pública de Mazatlán afirmó que las desapariciones son revisadas a diario en la Mesa Regional de Construcción de Paz, y que los operativos se han reforzado con apoyo de la Marina, Guardia Nacional y SEDENA. Aun así, los comerciantes denuncian pérdidas millonarias y un clima de inseguridad que no cede.