H. Cd. de Chihuahua.-
Ganaderos del estado encendieron las alertas tras confirmarse la reaparición del gusano barrenador en zonas limítrofes, una plaga que históricamente ha puesto en riesgo la exportación y el estatus sanitario de Chihuahua.
Especialistas como Julio Verdegues advirtieron que, si no se refuerzan los cercos sanitarios y la supervisión del hato, el estado podría enfrentar restricciones severas para el comercio pecuario con Estados Unidos y otros mercados internacionales.
Autoridades estatales ya desplegaron brigadas para revisar animales heridos, colocar trampas y monitorear brechas rurales donde se ha detectado actividad reciente del parásito.
Productores solicitaron endurecer operativos contra movilización irregular de ganado, acelerar los muestreos y aplicar sanciones ejemplares a quienes incumplan protocolos, pues una propagación masiva tendría efectos devastadores para ranchos y exportadores.
La instrucción es actuar sin pausa: el barrenador no da segundas oportunidades.